El propósito de este documento es describir la realidad lesbiana, los derechos de las lesbianas y el potencial político de las lesbianas en consonancia con los principios feministas radicales.
CONSIDERANDO, que las lesbianas son mujeres atraídas sexualmente de forma exclusiva por otras mujeres, de conformidad con el artículo 1 de la Declaración sobre los derechos de la mujer basados en el sexo; CONSIDERANDO, que las lesbianas hemos sufrido históricamente discriminación basada en nuestro sexo femenino y nuestra orientación homosexual; CONSIDERANDO que, históricamente, las lesbianas han sido ignoradas o representadas de forma imprecisa y negativa en los medios de comunicación; CONSIDERANDO, que son especialmente las lesbianas que no se ajustan a los estereotipos sexistas impuestos a las mujeres las que se han enfrentado a la discriminación más opresiva; CONSIDERANDO, que la discriminación sufrida por las lesbianas se ha producido en los ámbitos de la educación, el empleo, la vivienda, la atención médica física y mental, los establecimientos públicos y a manos de prácticamente todas las instituciones públicas y privadas; CONSIDERANDO que, históricamente, las lesbianas han sido objeto específico, por razón de sexo y orientación sexual, de violaciones y otros actos de violencia sexual por parte de hombres e instituciones; CONSIDERANDO que, históricamente, las lesbianas han sido objeto específico de la denominada «terapia de conversión» y de otros abusos por parte de las instituciones psicoterapéuticas y religiosas; CONSIDERANDO que las lesbianas, como mujeres, se ven afectadas por los mismos problemas biológicos, culturales y políticos que cualquier otra mujer; CONSIDERANDO que las lesbianas se encuentran en la intersección de «mujer» y «homosexual», y sufren una discriminación sistémica basada en estos motivos; CONSIDERANDO que la consagración de la denominada «identidad de género» en la legislación ha dado lugar a la supresión de los espacios exclusivos para lesbianas y a la demonización de las lesbianas que, reconociendo que la homosexualidad se basa en el sexo, rechazan las citas y las relaciones sexuales con hombres que dicen ser lesbianas; CONSIDERANDO que la heterosexualidad obligatoria se impone a todas las niñas y mujeres en cierta medida; por consiguiente, se resuelve
DECLARAMOS, que se apliquen las siguientes definiciones:
Mujer» significa hembra humana adulta;
Niña": mujer humana menor de edad;
Lesbiana» significa una mujer homosexual; o, una mujer o niña que se siente atraída exclusivamente por personas de su mismo sexo;
Por «género» se entienden los estereotipos basados en el sexo cuyo propósito es imponer a todas las mujeres a una posición subordinada en relación con todos los hombres;
Por «heterosexualidad obligatoria» se entiende la presión, el adoctrinamiento y la coacción patriarcales ejercidos sobre todas las mujeres y niñas para que se asocien sexualmente con hombres y sirvan a los hombres con servicios sexuales y domésticos;
Por «terapia de conversión» se entienden los intentos por parte de miembros de profesiones psicoterapéuticas o de consejeros religiosos u otros de cambiar la orientación sexual de una lesbiana para que incluya la atracción sexual hacia los hombres o la aceptación sexual de éstos;
Por «hombre» se entiende el varón humano adulto;
DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a ser reconocidas y a que se haga referencia a ellas como una categoría diferenciada e independiente; es decir, como lesbianas en lugar de «LGBT» o «LGB» o «gay» como un cajón de sastre; DECLARAMOS, que las lesbianas pertenecen a todos los espacios y actividades exclusivos para mujeres a los que cualquier otra mujer tiene derecho; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a diferenciarse y separarse de los hombres gays, que son ante todo hombres; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a crear y mantener espacios sólo para lesbianas; DECLARAMOS que, dado que aún no conocemos, y puede que nunca lleguemos a conocer plenamente, el origen de la orientación sexual, las lesbianas tienen derecho a ser protegidas como tales, independientemente de cómo haya surgido su lesbianismo, ya sea innato, influenciado socialmente o elegido; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a no ser sometidas a terapia de conversión; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a no ser esterilizadas por la fuerza; DECLARAMOS, reconociendo que si no se interviene, la mayoría de los jóvenes «trans-identificados» crecen y se convierten en lesbianas, gays o bisexuales, que el derecho a estar libre de la terapia de conversión incluye el derecho a estar libre del adoctrinamiento en la ideología de la identidad de género y de los procedimientos médicos estéticos que la acompañan, diseñados para disfrazar el propio sexo; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a estar libres de la violación «correctiva» y de la coacción sexual, incluida la retórica destinada a coaccionarlas o persuadirlas para que adopten comportamientos sexuales con hombres»; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a que se respeten sus límites sexuales y amorosos. Esto incluye las aplicaciones de citas, en las que las lesbianas tienen derecho tanto a evitar a los hombres como a buscar activamente a las mujeres; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a no ser discriminadas por su lesbianismo en el trabajo, la vivienda, la atención médica física y mental y los establecimientos públicos; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a no ver sus relaciones y su sexualidad erotizadas y fetichizadas en los medios de comunicación y en la pornografía; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a celebrar acuerdos de convivencia privados con sus parejas sexuales que sean tan exigibles como cualquier otro contrato, sin tener que contraer un matrimonio definido por el Estado; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a no ser discriminadas en la adopción de niños/as; DECLARAMOS, que las lesbianas tienen derecho a estar libres de estereotipos sexuales en todas sus formas y a manifestar y expresar su disconformidad con los estereotipos basados en el sexo sin discriminación ni otras interferencias.